El equipo del momento
Denver, potenciado por la llegada de Gordon, está en llamas. ¿Puede convertirse en candidato?
Bueno, primero lo primero. La semana pasada, el ignorante del pasante que estaba a cargo de escribir la entrega puso que Aaron Gordon era un discreto defensor, cuando en realidad Gordon es un defensor de elite. Su llegada ha potenciado muchísimo a Denver, desde todo punto de vista. Así que lamentablemente tuvimos que despedir al pasante y balearle una de sus rodillas. Ahora tomamos a otro, llamado Renzo, que se encargará de escribir los párrafos siguientes. Hecha esta salvedad, sean todos bienvenidos al newsletter de Facundo Campazzo Avedano, el único personaje capaz de lograr que miles de argentinos nos quedemos tres veces a la semana (e incluso cuatro) hasta entrada la madrugada viendo partidos de un equipo del estado de Colorado.
Estamos frente al mejor momento de la temporada para los Nuggets. Con ocho triunfos en los últimos diez juegos, el conjunto de Malone se afianzó en el Oeste: ya está solo en la quinta posición (récord de 30-18), a un partido del cuarto (Lakers) y dos del tercero (Clippers). El soplo de aire fresco que trajo la llegada del mencionado Gordon, sumado al despegue de Jamal Murray y el mayor compromiso defensivo colectivo, han impactado de manera muy positiva en la estructura. La siguiente nota de NBA Arg lo explica con perfección. Y este domingo, ante Orlando (a las 23, hora argentina), retornará Monte Morris, otra pieza influyente para el DT. Con lo cual, la pregunta que se impone es concreta: ¿podemos estar frente a un posible candidato a finales de conferencia? Si la salud acompaña…
Tal vez el regreso de Morris repercuta en los minutos de Facu. Pero paciencia: durante este tiempo pudo demostrar que su aporte atrás no lo puede realizar ninguno de los otros perimetrales del plantel. Y eso, al menos por ahora, le debería permitir mantener una base de minutos en cancha, más allá de que en ataque lleve 15 partidos seguidos sin alcanzar los diez puntos o más (desglose).
Al respecto de de la defensa: en muchos momentos vemos a nuestro jefe correr de un lado a otro buscando cubrir los distintos huecos que se van generando a partir de los permanentes cambios. Un estilo muy distinto del que le veíamos en España. Así que fuimos a la fuente a ver qué onda: “Acá hacen hincapié en otros detalles. Hay muchos cambios, siempre dependiendo de las características del rival. Por ejemplo: si el 4 que está en cancha es tirador o no. Y es determinante la comunicación con el compañero. Me estoy acostumbrando. En el Madrid prácticamente no cambiaba nunca de defensor. No sé si pude explicarme bien”. La verdad que no, pero bueno.
Esta semana será de mucha acción para Denver con cuatro juegos: Detroit, San Antonio (x2) y Boston. Todos en el Ball Arena, que desde el encuentro ante Sixers ya permite el ingreso de algunos fans mientras la vacunación avanza con velocidad en todo el territorio estadounidense.
Nos vamos con este hermoso compacto de Facu en la Selección, cuando jugaba prácticamente desnudo y el mundo del básquet se rendía a sus pies. Hoy todo es overol. Ya vendrán tiempos mejores. La adaptación es parte del crecimiento. Como la incertidumbre. Pero bueno, aflojemos con la poesía barata porque estoy a prueba y me van a limpiar a mí también. Hasta la semana que viene.
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